Si estás pensando en hacer una reforma en casa, es probable que hayas escuchado hablar del suelo laminado. Este tipo de revestimiento ha ganado popularidad en los últimos años, y no es para menos. Con su capacidad para imitar la apariencia de la madera o la piedra, su durabilidad y su fácil mantenimiento, el suelo laminado se presenta como una opción atractiva y práctica para muchos. Pero, ¿cómo elegir el mejor para tu hogar? Debes considerar las diferentes características al seleccionar el suelo laminado perfecto para tu reforma, desde el coste hasta la variedad de estilos disponibles. Así que, si estás listo para transformar tu espacio, sigue leyendo y descubre todo lo que necesitas saber sobre el suelo laminado.

¿Por qué elegir suelo laminado? Dando el primer paso hacia la reforma
Ventajas económicas
El suelo laminado tiene una gran ventaja: es más económico que otros materiales como la madera o la piedra natural. Si estás trabajando con un presupuesto ajustado, el suelo laminado puede costar entre 1 y 7 dólares por pie cuadrado, mientras que la madera dura puede llegar a costar de 3 a 15 dólares. Esto significa que puedes darle a tu hogar un aspecto elegante sin romper la banca. Además, no solo es más barato en la compra, sino que su instalación también suele ser más asequible gracias a sus sistemas de instalación simples, como el sistema de clic. Esto puede traducirse en un ahorro considerable en costos de mano de obra.
Durabilidad para el día a día
Si tienes niños o mascotas en casa, la durabilidad es un aspecto importante a considerar. Los suelos laminados están diseñados para resistir rayones, golpes y manchas, lo que los convierte en una opción ideal para las zonas de mayor tránsito. Muchos cuentan con una clasificación de resistencia a la abrasión (AC), que indica su capacidad para soportar el desgaste. Aunque no son perfectos para zonas muy húmedas, hay opciones que ofrecen resistencia a la humedad e incluso algunas que son completamente impermeables, ideales para cocinas y baños. Con el cuidado adecuado, un buen suelo laminado puede durar entre 15 y 25 años.
Estilo y variedad: ¡Hay para todos los gustos!
El suelo laminado no solo es resistente y económico, sino que también viene en una amplia variedad de estilos, colores y texturas. Desde imitaciones de madera auténtica hasta estilos más modernos y atrevidos, como patrones geométricos, el cielo es el límite. Las tecnologías de impresión actuales permiten que imiten de manera convincente materiales naturales. Ya seas amante del estilo clásico o busques algo más contemporáneo, seguro que encuentras una opción que se ajuste a tu gusto. Y no te olvides de los laminados texturizados, que ofrecen una sensación más táctil y ayudan a ocultar imperfecciones.
Instalación: ¡Manos a la obra!
Fácil y rápida
Una de las grandes ventajas del suelo laminado es su facilidad de instalación. Muchos productos incluyen sistemas de clic que permiten una instalación sencilla y rápida, lo que significa que podrías incluso hacerlo tú mismo si te sientes aventurero. Además, el laminado puede instalarse sobre suelos existentes, lo que simplifica aún más el proceso de reforma. Solo asegúrate de que el subsuelo esté limpio y nivelado para obtener los mejores resultados. Y recuerda dejar un pequeño espacio alrededor de los bordes para permitir la expansión y contracción del material.
Consejos prácticos para la instalación
Si decides lanzarte a la instalación, asegúrate de tener a mano las herramientas adecuadas. Necesitarás un cortador, una regla y un martillo de goma. Asegúrate también de seguir las instrucciones del fabricante, ya que algunos modelos pueden tener requisitos específicos. Si bien es una tarea que muchos pueden asumir, no dudes en pedir ayuda a un amigo o familiar. Siempre es más divertido hacerlo en compañía, ¿verdad?
Mantenimiento: La parte más fácil
Cómo cuidar tu suelo laminado
Una de las razones por las que muchas personas optan por el suelo laminado es su bajo mantenimiento. A diferencia de la madera, que requiere un cuidado especial, el laminado solo necesita una limpieza regular. Un barrido frecuente y una mopa húmeda ocasional son todo lo que necesitas. Es importante evitar el exceso de agua al limpiar, ya que esto puede causar que el material se deforme. Con un mantenimiento adecuado, tu suelo laminado no solo se verá genial, sino que también se mantendrá en excelente estado durante muchos años.
Errores comunes a evitar
Algunos propietarios pueden caer en la trampa de pensar que el laminado es indestructible. Aunque es bastante resistente, aún debes tener cuidado con objetos afilados que puedan rayar la superficie. También es recomendable colocar alfombrillas en las entradas para minimizar la suciedad. Estos pequeños pasos ayudarán a prolongar la vida de tu piso y mantenerlo siempre como nuevo.
El suelo laminado es, sin duda, una elección inteligente para cualquier reforma. Con su relación calidad-precio, durabilidad y variedad de estilos, se adapta a las necesidades de cualquier hogar. Desde la instalación fácil hasta el mantenimiento sencillo, no hay razón para no considerarlo. Si estás pensando en reformar tu espacio, no dudes en dejarnos ayudarte. En Cubicup, tenemos las mejores opciones para ti. ¡Contáctanos y hablemos sobre tu proyecto!